Pride Month vs el capitalismo arcoíris y la violencia contra la comunidad 

Aunque el arcoíris y las banderas inunden las redes , no significa que la sociedad haya modificado sus prejuicios y odio contra lxs disidentes

Desde el 1 de junio todo se pinta de arcoíris. Las grandes marcas y empresas lanzan sus productos “pride”, las redes sociales colorean sus interfaces y el mundo se llena de banderas.

Sin embargo, muchas de las empresas y marcas que salen en junio con el arcoíris, los 11 meses restantes promueven políticas discriminatorias para sus empleadxs LGBTQ+ disidentes y permiten actos de odio. Esto es el capitalismo arcoíris: la mercantilización de una causa social sin una conciencia o compromiso real.

Al día de hoy, aún existen legislaciones, prohibiciones y discriminación hacia la comunidad. Porque aunque el arcoíris y las banderas inunden las redes sociales, no significa que la sociedad haya modificado sus prejuicios y odio contra las personas disidentes.

Derechos Humanos LGBTTQ+ alrededor del mundo

De acuerdo a Amnistía Internacional y Human Rights Watch, los derechos para asegurar la dignidad y calidad de vida de las personas LGBTTQ+ son derechos humanos.

Algunas de las leyes sobre derechos son: eliminar las leyes que consideren delito entablar relaciones consentidas entre personas del mismo sexo; el reconocimiento gubernamental de las relaciones entre personas del mismo sexo (matrimonio o concubinato); adopción homoparental; reconocimiento de la familia homoparental; políticas públicas que prevengan, eviten y sancionen actos de discriminación por orientación sexual y/o identidad o expresión de género.

Ademas de asegurar el acceso seguro a trabajos, bienes y servicios, vivienda, educación y salud); prohibición de las terapias de conversión; derechos migratorios para matrimonios homosexuales; reconocer la autodeterminación del género de personas trans; permitir que quienes tienen relaciones sexuales con personas de su mismo sexo puedan donar sangre. 

Sin embargo en el mundo, sólo 30 países reconocen el matrimonio entre personas del mismo sexo -o de identidad disidente-. El caso de México es parcial, no en todo el territorio es reconocido. No obstante, en 68 países, existen leyes que penalizan las relaciones no heterosexuales. Además, hay 12 países que criminalizan la identidad de las personas trans y prohíben “fingir ser del sexo opuesto”.

La mayoría de los países con mejor seguridad y derechos para las personas de la comunidad LGBTTQ+ se encuentran en Europa y América.

En México

En el país, mantener relaciones sexo-afectivas con alguien del mismo sexo o de identidad disidente es legal desde 1871. Además, existe protección legal contra la discriminación laboral, bienes y servicios y en cualquier espacio de la esfera pública -que se cumplan es otro tema-.

El matrimonio igualitario se encuentra permitido en 25 entidades federativas: Ciudad de México, Baja California, Baja California Sur, Sinaloa, Coahuila, Nuevo León, San Luis Potosí, Nayarit, Jalisco, Colima, Michoacán, Oaxaca, Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Yucatán, Chihuahua, Puebla, Tlaxcala, Morelos, Hidalgo, Aguascalientes, Querétaro, Sonora y Zacatecas.

En cuestiones reproductivas y familiares, existe derecho a la adopción -aunque incluso para parejas heterosexuales es un proceso complicado- y acceso a técnicas de reproducción asistida.

Los crímenes de odio

Veracruz es el estado más peligroso para no ser cis-heterosexual. Desde 2019, esta entidad es la que más ha registrado asesinatos a personas disidentes según datos del Observatorio Nacional de Crímenes de Odio contra personas LGBT.

En 2019 se contabilizaron 74 asesinatos en todo el país, las entidades con más víctimas fueron: Veracruz con 21, Coahuila con 12 y Chihuahua con ocho. En 2020 sumaron 66 en todo el país: Veracruz, Chihuahua, Michoacán y Oaxaca encabezando la lista. 

El año pasado, se registraron 73 asesinatos, 14 en Veracruz, 12 en Morelos y 10 en Baja California. En lo que va del 2022, ya suman cuatro. 

El Consejo Nacional para Prevenir la Discrimianción (Conapred), señaló vía Twitter en el Día Internacional contra la Homofobia, Transfobia y Bifobia, que tiene registradas mil 175 quejas relacionadas con discriminaciones: 708 por homofobia, 240 por lesbofobia, 220 por transfobia, cuatro por intersexfobia y tres por bifobia. 

La comunidad trans, la más agredida

De acuerdo al trabajo de investigación de ‘Letra Ese: La otra pandemia. Muertes violentas LGBTI+ en México 2020’, más de la mitad de los asesinatos cometidos -clasificados como crímenes de odio- del 2020, fueron perpetrados contra mujeres trans. Es decir, el 54.5% fueron transfeminicidios.

Además, señala que los cuerpos de las víctimas de transfeminicidios suelen ser arrojados en terrenos baldíos, canales, ríos o predios.  La mayoría de las mujeres lesbianas o trans, son asesinadas con armas de fuego.

Sin embargo, sus cuerpos suelen presentar lesiones de violencia extrema como heridas punzantes, mutilación, desmembramiento, quemaduras y contusiones. También se encuentran ataduras de pies y manos así como signos de violencia sexual y tortura.

Violencias atravesadas 

Según el informe antes mencionado de Letra Ese, hay diversos patrones de violencia de acuerdo al género, orientación sexual e identidad o expresión de género de las víctimas.

Las mujeres trans son atravesadas por la violencia transfóbica y la violencia misógina. Sus cuerpos son arrojados a lugares públicos y suelen presentar signos de violencia sexual y tortura. 

Los hombres trans suelen aparecer con signos de violencia sexual y golpes, a modo de “castigo” por el rechazo a la binariedad genérica.

Los hombres gays son “castigados” por la violencia machista. Sus victimarios suelen engañarlos mediante encuentros a modo de cita. Sus cuerpos suelen presentar heridas por armas punzocortantes o por asfixia.

Las lesbianas son atravesadas por la violencia lesbomisógina, los ataques a mujeres lesbianas suelen darse cuando están en pareja. Sus cuerpos suelen presentar heridas de armas punzocortantes y golpes.

Los casos de las mujeres bisexuales también están atravesados por la violencia de género y la bifobia. La mayoría de los victimarios son ex parejas masculinas. Sin embargo, suelen investigarse como feminicidios y no se toma en cuenta la orientación sexual de la víctima. 

Los retos del ‘pride month’ y todos los meses

Es necesario pintar todo de arcoíris, visibilizar las banderas, encontrar representación en los medios de comunicación y producciones cinematográficas, literatura y música. No esconder los afectos, no esconder las identidades ni reprimir las expresiones de género.

Por otro lado, es también necesario señalar que, aunque todo parezca muy LGBT+ friendly, la violencia homofóbica, lesbofóbica, transfóbica, bifóbica y demás sigue existiendo. Siguen cobrando cientos de vidas a causa de la orientación sexual y la identidad sexo-génerica no normativa. 

No sirve de nada colgarnos el arcoiris si al final de este hay miles de cuerpos sin vida.

Total
0
Shares
Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Publicaciones Relacionadas