“Defiende tus derechos y sé valiente, no te dejes intimidar…”
Margaret Keane
Por: Melissa Zamudio del Palacio
Peggy Doris Hawkins, mejor conocida como Margaret Keane, es una famosa artista estadounidense que se popularizó por los característicos enormes ojos de los personajes de sus pinturas.
A pesar de que actualmente es muy reconocida en el ámbito artístico y que su historia ha pasado a la pantalla grande en películas como Big Eyes (2014) dirigida por el aclamado director Tim Burton, en el pasado se llegó a desconocer completamente su talento para pintar.
Después de su primer divorcio, Margaret conoció a Walter Keane quien sería su esposo por 10 años y quien se haría pasar por el autor de las pinturas que ella creaba.
Walter Keane era un hombre de negocios que se dedicaba principalmente a la venta de inmuebles en California.
Se desconoce si realmente estudió en Europa como él afirmaba, pero a mediados de los años cincuenta, se mudó a San Francisco donde conoció a Margaret en una exhibición de arte.
Durante ese tiempo comenzaron a salir y posteriormente se casaron en 1955. A partir de este momento, Margaret comenzó a firmar sus pinturas bajo su apellido de matrimonio “Keane”.
En esos años, Walter comenzó a vender exitosamente las pinturas de su esposa en su club favorito de San Francisco, The Hungry i. Fue aquí cuando Margaret descubrió que su marido estaba llevándose el crédito por las obras que ella pintaba.
“Cuando alguien caminó hacia mí y me preguntó: ¿Tú también pintas?, estando en shock pensé: ¿Él se está llevando crédito por mis pinturas?”, expresó en una entrevista.
Por 12 largos años, Walter le hizo pensar que sus pinturas valdrían más si continuaba haciéndole creer al público que él era el autor de éstas y así se convirtió en uno de los artistas más famosos de la década de los sesenta.
Margaret, quien empezaba a cansarse de esta gran mentira, comenzó a cambiar su estilo de pintura y a firmar sus nuevas obras bajo el nombre “MDH Keane”, acción que le causó grandes conflictos con su esposo.
Así, en 1965, se divorciaron y ambos reclamaron los derechos sobre los cuadros.
En años posteriores, varias personas y medios importantes como el periódico USA Today, continuaban difundiendo y defendiendo la idea de que Walter era el verdadero autor de las pinturas.
“Por muchos años permití que mi esposo se llevara el crédito por mis pinturas. Pero un día, cuando ya no podía más con la decepción, lo dejé a él y a mi hogar de California y me mudé a Hawaii”.
En 1986, Margaret Keane se armó de valor y contó toda la verdad en la agencia United Press International y demandó por primera vez a Walter.
Durante el juicio, se les entregó a ambos un lienzo, pinturas y pinceles y se les pidió que pintaran un cuadro característico del verdadero artista de las obras.
Walter fingió un dolor de hombro mientras que Margaret terminó su cuadro en menos de una hora. De esta manera se le otorgó el derecho de las pinturas y también se condenó a Walter con una retribución de 4 millones de dólares.
Actualmente, Peggy Doris Hawkins vive en Napa, California y cuenta con una galería de arte en San Francisco donde se encuentra la colección más grande de sus pinturas.
La historia de la popular pintora Margaret Keane es un perfecto ejemplo de resistencia, valentía y justicia por defender lo que nos pertenece.