“Algunas personas no enloquecen nunca. Qué vida tan horrible deben tener”. Charles Bukowski
Por: Jacqueline Hernández Hernández
Eventos Gandhi junto a Producciones El Salario del Miedo se unieron para conmemorar al escritor alemán-estadounidense, Charles Bukowski, con una charla online que se realizará hoy mismo a través de Facebook Live Eventos Gandhi a las 17:00 hrs. tiempo de Tijuana.
En la transmisión participarán los escritores J. M. Servín y Roberto Castillo Udiarte, este último fue el primero en traducir la obra de Bukowski para Latinoamérica.
El domingo 16 de agosto se cumplieron 100 años del nacimiento del padrino del movimiento realismo sucio, Heinrich Karl Bukowski, mejor conocido como Charles Bukowski por su traducción al inglés.
Alemán de nacimiento que emigró con su familia a Estados Unidos a los tres años de edad. Creció como un niño retraído e introvertido por las burlas de sus compañeros de clases y los golpes que le propinaba su padre en casa.
Durante dos años estudió literatura y arte en la universidad, pero tuvo que abandonar la carrera debido a la mala relación con su padre. Se mudó a Nueva York donde desempeñó una gran cantidad de oficios muy mal pagados, hasta que consiguió un empleo como cartero, de donde más tarde sacaría la inspiración para su novela Cartero.
Un escritor con muchas altas y bajas, más bajas que altas, que se aferró a la literatura como su única salvación.
En su trabajo se retrata la cruda realidad de sus experiencias a lo largo de su vida, el título de su primera columna “Notas de un viejo sucio” es un ejemplo de su obra.
Por algunos años los libros de Bukowski estuvieron en la sección prohibida de las bibliotecas, principalmente en una época donde la moralidad de un esposo trabajador, el ama de casa e hijos hacen una familia feliz. Donde no querían que los alumnos leyeran sobre marginalidad, soledad, peleas callejeras, fracasos amorosos, sexo, habitaciones sucias, borracheras de vodka y vino barato.
Después de su muerte, el 9 de marzo de 1994 a los 74 años por leucemia; su éxito se hizo inminente, su trabajo se tradujo en diferentes idiomas y se volvió un ícono de la transgresión en la literatura.