Templo

Tanto abatí el latir para que no se me negara la gracia. Quise entrar al reino santificado, sentarme ante los pies de mi maestro intangible. Sólo conseguí proclamar un rechazo ante mi imagen.

“The safe place” de Carol Schiff

Por Génesis Giselle Rosas Quezada

Templo

Por las vigas se eleva el azabache canto de pechos injuriosos. Se escurre el cebo de pecados ocultos. Ojos cerrados, ecos se unen al lloro y a la danza continua. Las barbaridades cometidas se pasean por el edificio. Aquí soy, por la intensidad de mi grito arrepentido. Soy una hija divina por lo espeso de mi llanto. Soy una figura con voto al rasgar mis piernas ante el suelo de la penitencia. El púlpito silba, susurra, grita: “Él no rechaza al corazón contrito y humillado” y tanto hundí mi frente humillada, tanto abatí el latir para que no se me negara la gracia. Quise entrar al reino santificado, sentarme ante los pies de mi maestro intangible. Sólo conseguí proclamar un rechazo ante mi imagen. Intento de espíritu contrito. He clausurado las puertas del templo. Abro mi voz al deleite.

 

Génesis Rosas, originaria de Tecate, Baja California. Estudia la licenciatura en Lengua y Literatura de Hispanoamérica en la Universidad Autónoma de Baja California. Acreedora de dos premios a nivel municipal y estatal en el género de ensayo. Ha impartido un taller de creación literaria para jóvenes. Actualmente forma parte de “Poesía Cuchumá”, un grupo dedicado al fomento de la poesía en la ciudad de Tecate.

Correo electrónico: genesis.rosas@uabc.edu.mx

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