Colectiva Enclave Caracol

Abuso de autoridad: Clausuran Enclave Caracol

Por abuso de autoridad clausuran la Colectiva Enclave Caracol, un café y espacio comunitario autónomo en la zona norte de Tijuana.

“Para poder reabrir el lugar tendrán que pagar una multa de 18 mil pesos“.

Por abuso de autoridad clausuran la Colectiva Enclave Caracol, un café y espacio comunitario autónomo que se localiza en la zona norte de Tijuana, muy cerca de la frontera y dentro de una zona roja. 

El edificio de la colectiva está en medio del turismo sexual y aglomeración de personas en situación de calle, deportados y deportadas, así como de migrantes.

Por lo que es muy común que la policía municipal, estatal y hasta la guardia nacional hagan sus rondines las 24 horas del día, que testigos afirman sólo son para aprovecharse de todo aquel que no se puede defender

Foto Facebook @EnclaveCaracol

Clausura de Enclave Caracol 

El 22 de enero a las 7 de la noche, una voluntaria del café se dio cuenta de que cerca del recinto, un grupo de oficiales detuvieron y estaban revisando a una persona, como comúnmente pasa.

Sólo que una voluntaria del café, junto a otra compañera, salió a la terraza del edificio para documentar los hechos con su celular, mientras tanto uno de los policías se percató y decidió también grabar en dirección hacia la colectiva.

La respuesta de la voluntaria fue levantar el dedo corazón en dirección al oficial, por lo que éste junto a sus compañeros decidió acercarse al lugar y comenzó a intimidar a la chica.

Foto Enrique Martínez Apodaca

Ambas decidieron resguardarse dentro del edificio pero, esto no impidió que los oficiales también ingresaran, por lo que las compañeras solicitaron a los oficiales que se retiraran bajo el argumento de que nadie en el edificio solicitó su auxilio. Los oficiales respondieron que podían estar ahí porque era un espacio público.

En ese momento, los policías comenzaron a hablar entre ellos con códigos, diciendo en un tono intimidatorio y prepotente que “si no era por x cosa, sería por y” y, entonces, llamaron a inspección municipal.

Otra persona parte de la colectiva, al percatarse de las unidades de policías tanto afuera como dentro del recinto, decidió grabar los hechos con su celular; sin embargo cuando los oficiales se dieron cuenta de que estaban siendo documentados, apartaron a esta persona varios metros del espacio donde el alumbrado público no era suficiente para iluminar.

Foto Enrique Martínez Apodaca

Decidieron interrogarle y revisar sus pertenencias, mientras tanto los demás oficiales continuaron hablando entre ellos y mencionaron algo sobre darse prisa con los reglamentos de inspección municipal  

A medida que pasó el tiempo más policías ingresaron al espacio, tomaron fotografías y revisaron el edificio.

Foto Enrique Martínez Apodaca

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Inspección Municipal y Policías asociados

Cuando llegó la persona encargada de inspección municipal, uno de los policías le comenta que “había un problema con una mujer que estaba adentro en la barra y que le hiciera el favor, entonces, el de reglamentos le dijo que sí, que no se preocupara, que él ahorita lo iba a resolver”.

Los de reglamentos comenzaron a hacer la inspección, mientras que los policías seguían en el espacio tomando fotos. 

La voluntaria del café, que levantó su dedo corazón en dirección al oficial, no pudo terminar de mostrar los documentos que le solicitaba reglamentos, porque en todo momento la policía la siguió hostigando e intimidando para llevarla detenida debido a que faltó a la autoridad. 

Foto Enrique Martínez Apodaca

Entre ellos comentaron que si las otras personas se ponían igual, también se las iban a llevar detenidas, por lo que la voluntaria en cuestión, decidió salir del espacio para que se la llevarán detenida y la presentarán ante el juez.

Otras personas miembros de la colectiva se quedaron a recibir el acta, en la que les informaron que clausuraron el espacio.

Foto Facebook @EnclaveCaracol

“Los de reglamentos todo el tiempo hicieron comentarios despectivos del lugar y nunca hicieron recomendaciones puntuales. Cuando les mostramos algunos de los permisos argumentaban que no eran los originales”, comentaron testigos de los hechos.

Para que la compañera no se quedara detenida toda la noche, pagaron una multa de mil 700 pesos y hasta el momento el edificio se encuentra clausurado, para poder reabrirlo tendrán que pagar una multa de 18 mil pesos.

Puedes apoyar a Enclave Caracol -> Support Enclave Caracol & Tijuana Comida No Bombas

Nota con información de la cuenta de Facebook de Enclave Caracol.  

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