La planta de cannabis contiene aproximadamente 60 fitocannabinoides entre los cuales el THC es el más abundante y con efectos psicoactivos. El CBD -el más popular para consumo medicinal- no tiene estos efectos pero de acuerdo al Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos, puede utilizarse como antiinflamatorio, analgésico, antipsicótico, anti ansiolítico y antiepiléptico.
Mezclar marihuana con diversos productos puede potenciar o modificar el efecto de esta. Puede combinarse con wax, hash o kiff para aumentar el efecto psicoactivo y de forma contraria, el tabaco permite reducir la potencia de los efectos.
Una alternativa para consumir marihuana es mezclarla con distintas hierbas para mejorar el sabor al fumarla, potenciar los efectos o elevar las propiedades del cannabis, tal es el caso de la lavanda.
Beneficios de la lavanda
La lavanda es una planta nativa del Mediterráneo conocida y empleada por sus efectos botánicos y medicinales. De acuerdo a información de National Library of Medicine, los principales compuestos de esta son el linalool y acetato de linalilo.
Existen varias investigaciones que han probado los efectos de la lavanda en humanos y animales, entre los más destacados se encuentran: anti ansiolíticos, estabilizadores de ánimo, de sedación, analgésicos, anticonvulsivos y de neuroprotección. Estos estudios han retomado el uso de la lavanda en tratamientos para desórdenes neurológicos.
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Se han realizado también investigaciones sobre el mecanismo de acción de la lavanda en el sistema nervioso. Se demostró que la planta inhibe la reacción inflamatoria. Entre los hallazgos se indica que la lavanda podría ser una alternativa para el tratamiento del Alzheimer.
Tres ensayos clínicos investigaron la eficacia del aceite de lavanda en pacientes con trastorno de ansiedad mixto y sus efectos fueron superiores al placebo en 221 pacientes.
El tratamiento también mejoró los síntomas relacionados a la inquietud, sueño perturbado, insomnio y somatizaciones. La administración de lavanda tiene una influencia beneficiosa en el bienestar general y calidad de vida.
En el consumo personal, la lavanda se utiliza por sus propiedades relajantes para tratar el insomnio, la ansiedad, la tensión arterial así como reducir el mareo. También se emplea para aliviar el dolor por sus propiedades antiinflamatorias.
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¿Un porro con lavanda?
Combinar la lavanda con el cannabis permite aprovechar el linalool, un terpeno que comparten ambas plantas. La mezcla de los cannabinoides y terpenos se equilibran entre sí.
Cuando este compuesto de la lavanda interactúa con el THC del cannabis se crea un potencial relajante muscular; mientras que cuando se combina el linalool con el CBD aumenta las propiedades anticonvulsivantes de ambas plantas.
La lavanda se puede agregar a cremas o bálsamos de cannabis, así como la flor deshidratada para los porros o mezcla de pipa; también se puede agregar a los comestibles o a infusiones como el té.