Pensé que se me quitaría después de cumplir los dieciocho años y luego, la felicidad llegaría. No fue así, no es una etapa. El malestar no pasa, al contrario, va cansando el alma.
Vestía una cabellera con tres cuartos de canas y tramos del mismo color. Me miraba fijamente como si diez años nos hubiesen separado, me tomaba del hombro como si tuviese que entregarme los cuatro consejos más importantes de mi vida
No puedo salir estando tan calmado, por eso reviso con frecuencia mi celular, para encabronarme más. Tampoco puedo salir desarmado. Llevo conmigo mi cuchillo Vulcanus de doble filo y guarniciones de plata, lástima que no sea de obsidiana
La identidad chicana es una posición política que denuncia el discurso hegemónico capitalista patriarcal.
Este mes de octubre presentamos tres poemas chicanos, que le da “quehacer” a la poesía, tres escritores separados por tierra, separados por verso…
El chicano es un ser exótico renacido, de lenguaje mezclado, de extensas raíces, no es de aquí ni de allá, en la búsqueda constante de lo identitario su viaje se hace confuso.
Quería eso, nada más. Sentirse parte de un mundo, aunque fuese azul.
A lo largo del camino aparecen pintas y símbolos de anarquía, el rector de la UNAM hecho en papel maché con cara de susto y hasta el presidente hecho caricatura. Los alumnos de CCH parecen los portadores del máximo espíritu protestante…
Si veo hacia arriba, puedo verlo con claridad sin lastimarme los ojos. Su luz blanca dispersa el aprensivo cielo azul e inverso que es el mar, poco claro aún cuando es de día…
Amora no es solo lesbianismo o amor sáfico, es el eterno femenino, es la vida cotidiana, son las mujeres que se aman como hermanas, como amigas, es la ciudad como el espacio central, es lo cotidiano.